»–Como todo
el mundo se mete en todo –dice Brady sin levantar la voz–. Paso a paso.»
Stephen
King, Fin de guardia.
«La trilogía Hodges» llegó a su fin.
Fin de guardia, libro que cierra la serie policial de Stephen King compuesta por las novelas Mr. Mercedes (2014) y Quien pierde paga (2016), acaba de ser publicado por Plaza & Janés en una hermosa edición de tapa dura con sobrecubierta.
«La trilogía Hodges» llegó a su fin.
Fin de guardia, libro que cierra la serie policial de Stephen King compuesta por las novelas Mr. Mercedes (2014) y Quien pierde paga (2016), acaba de ser publicado por Plaza & Janés en una hermosa edición de tapa dura con sobrecubierta.
Una
vez más, el inspector retirado Bill Hodges tiene que enfrentarse a un caso
complicado, en el que muchas vidas (entre las que se cuentan la suya y la de
sus más queridos amigos) se ven en peligro. Brady Hartsfield, aquel psicópata
que ya había asesinado a varias personas en su atentado en el Centro Cívico y
había intentado asesinar a muchas más en el auditorio Mingo durante el
concierto de ‘Round Here, vuelve a convertirse en una amenaza. El problema es
que, en teoría, Brady todavía no se recuperó de ese último encuentro con el
grupo de Bill, ocho años antes, en el que Holly lo golpeó en la cabeza con una
cachiporra, ocasionándole daño cerebral. Ahora, confinado en la habitación 217
del Hospital Kiner Memorial, y no siendo mucho más que un «vegetal», Brady
desarrolla en secreto una habilidad bastante inusual: puede mover objetos con
sólo pensar en ellos y, algo todavía más increíble, influir en la mente de las
personas hasta el punto de meterse en ellas y, si lo desea, tomar el control.
Con esta nueva habilidad, Brady no deja de pensar en la magnitud de su
venganza.
Fin de guardia es una nueva muestra
(como si hiciera falta alguna más) de que Stephen King sigue siendo un maestro
en lo que hace. Con la destreza que lo caracteriza, y que lo convirtió en uno
de los escritores más exitosos de la historia de la literatura, el autor de El resplandor logra combinar una
historia interesante e imposible de abandonar con un trasfondo complejo en el
que no sólo cobran vida personajes entrañables, sino que también se desarrollan
temas de gran profundidad, entre los que se destaca el suicidio. En efecto, Brady, que ya había inducido al suicidio a
Olivia Trelawney (dueña del Mercedes con que se cometió el atentado en el Centro
Cívico) y había intentado hacer lo mismo con Hodges, desarrollará su plan
teniendo en cuenta su pasión por empujar a las personas hasta el límite y ver
cómo, solas, lo atraviesan.
De
esta manera, con Fin de guardia no sólo
tenemos una novela para pasar un buen rato, sino una historia que (además del
buen rato, por supuesto) es también una reflexión profunda, inteligente y bien
informada sobre lo que significa el suicidio en la sociedad norteamericana y,
por extensión, en las sociedades hiperconectadas del siglo XXI.
Por
otra parte, es interesante ver «la trilogía Hodges» como un recorrido por la
misma versatilidad de Stephen King. Partimos de un formato policial (en Mr. Mercedes), pasamos por un relato en
el que la verdadera protagonista es la pasión por la literatura (en Quien pierde paga) y llegamos a un
thriller fantástico (en Fin de guardia),
todo en lo que podría considerarse una misma historia. No es de extrañar que,
entre los lectores constantes, esta última entrega sea una de las más celebradas de la saga.
No
puedo decir mucho más sin incurrir en algún spoiler.
Prefiero detenerme antes de arruinarle al lector el innegable placer de
dejarse llevar por la lectura. Lo único que puedo agregar (y me temo que con
esto ya digo mucho) es que terminé la novela con un nudo en el pecho y lágrimas
en los ojos.
Nada más.
***
- King, Stephen, Fin de guardia, Barcelona, Plaza & Janés, 2017.